OSLO (Reuters) - Piscicultores y criadores europeos de salmones están preocupados por el rápido crecimiento del súper pez transgénico y temen que su expansión se engulla parte de los 107.000 millones de dólares anuales del negocio global de la acuicultura.
"No tenemos cerdos gigantescos en Europa, ni vacas gigantescas, y no hay necesidad de un salmón de tales características", dijo Geir Isaksen, director ejecutivo de la gran piscifactoría noruega Cermaq.
El salmón atlántico genéticamente modificado (GM), patentado por la firma de biotecnología AquaBounty, es promocionado por crecer dos veces más rápido y podría ser aprobado por reguladores estadounidenses a partir del este verano boreal, trasladando la lucha por los alimentos transgénicos al mostrador de pescados.
"Este es un proceso seguro y estable", dijo a Reuters Ronald Stotish, director ejecutivo de la estadounidense AquaBounty, explicando cómo técnicos inyectan genes de salmones real y faneca en huevos del salmón atlántico.
El resultado - tres especies en una, y por ende un animal transgénico - sería el primer animal GM aprobado para consumo humano, incorporándose a plantas como la soja y el maíz que han sido alteradas para tolerar herbicidas más eficaces.
"Si se convierte en algo exitoso, es claramente negativo para los actuales criadores de salmones", dijo Dag Sletmo, un analista del banco de inversión ABG Sundal Collier en Oslo.
Productores noruegos de salmón atlántico, encabezados por Cermaq y Marine Harvest, proporcionaron el 65 por ciento de la oferta mundial en 2010, exportando un récord de 5.900 millones de dólares mientras las nuevas clases medias de Asia y Europa del este avivan la demanda.
Sletmo dijo que el salmón se ha convertido en una materia prima global, cuyos precios podrían caer si las modificaciones genéticas fomentan la oferta mientras socavan la demanda en mercados centrales como Europa, donde los consumidores están muy en contra de los alimentos GM.
"Esperamos que sea menos desafiante comercializar ese producto en Estados Unidos que en Europa, pero no es seguro que sea comercializable en Estados Unidos", dijo Joergen Christiansen, portavoz de Marine Harvest, que está "monitoreando" AquaBounty.
En una encuesta online del Washington Post el otoño boreal pasado, el 58 por ciento de los encuestados dijo que no comería salmón GM. Un sondeo de la Comisión Europea de la misma época encontró que el 77 por ciento de los europeos se oponía a cualquier tipo de alimentos GM.
¿CAMBIO DE REGLAS?
Con sus profundos fiordos, Noruega produjo el año pasado 945.000 toneladas de salmón atlántico, siete veces más que Gran Bretaña, que está en segundo lugar, y 53 veces más que Estados Unidos, según la firma de investigaciones Kontali Analyse.
Stotish lo llamó "una vergüenza nacional" para su país y dijo que los transgénicos podrían ayudar a los productores estadounidenses de salmones, langostinos y tilapias a competir en una industria de acuicultura fijada el año pasado en 107.000 millones de dólares por la firma analista Datamonitor.
Una comisión de la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA) estableció que el salmón de AquaBounty es seguro y considera que es poco probable que dañe el medio ambiente si es criado en piscifactorías en tierra que no permiten el contacto con peces silvestres.
Stotish indicó que unas instalaciones cerradas para producir 2.000 toneladas de salmón anuales costarían entre 8 y 10 millones de dólares.
"Nuestro salmón haría que esas instalaciones sean económicamente viables desde un punto de vista comercial, desde el cual no resultarían viables usando salmón convencional", afirmó Stotish.
Además, la producción en tanques reduciría los escapes, la contaminación y los parásitos que aquejan a criadores de pluma de mar, indicó el director. Y como AquaBounty convierte todos sus embriones en hembras estériles, el acervo genético silvestre no correría riesgos si se perdiera un súper pez.
Varios expertos dijeron que el rechazo sería casi automático si alguien intentara vender huevos o pescado GM en Europa. La Autoridad Europea de Seguridad Alimenticia no tiene solicitudes pendientes.
"Apenas se nos permite usar una brizna que esté genéticamente modificada", dijo Thoralf Solberg de SalmoBreed, un destacado proveedor mundial de huevos que competiría con AquaBounty.
LUCHANDO CONTRA EL ESTIGMA
Stotish asegura que sus más acérrimos detractores tienen mercados que proteger, como los pescadores de Alaska que acuñaron el epíteto "Frankenpez". Dijo no tener "interés de meterse en una disputa con los europeos".
"Dentro de 10 ó 20 años puede que ellos también estén interesados en el salmón GM, pero ahora esta batalla no se libra en el campo de la ciencia", afirmó Stotish.
El biólogo sostuvo que el primer lote de su salmón "AquaAdvantage" podría llegar al público en 2013 si la FDA permite la venta de huevos este verano boreal. Una portavoz dijo que una aprobación tan rápida sería posible si la agencia prescindiera de un importante estudio ambiental.
"Tenemos un criadero y somos capaces de producir huevos en este momento", indicó Stotish, añadiendo que el interés de potenciales clientes de piscifactorías era "alentador y bastante amplio".
Según Scotish, AquaBounty busca afianzarse en Estados Unidos antes de pensar "fuertemente" en China.
"Nuestra opinión siempre ha sido que si podemos demostrar que se puede aprobar en Estados Unidos, entonces otros reguladores lo considerarán (...) y nosotros llegaremos a algunos de estos mercados", indicó Stotish.
OPOSICION DE CRIADORES EUROPEOS
Hoy, los criadores sólo mantienen salmones jóvenes en los tanques y los llevan al mar hasta cosechar, usualmente a los dos o tres años de edad.
Si se le deja envejecer, el salmón de AquaBounty no crece más en tamaño que el tipo estándar. Su ventaja, dice la compañía, es que "los índices de crecimiento permiten cosechar en aproximadamente la mitad del tiempo".
Trygve Gjedrem, científico del instituto NOFIMA de Noruega, dijo que eso era engañoso porque los gráficos entregados a los reguladores estadounidenses muestran que la ventaja de crecimiento dos veces más rápido del pescado GM se va agotando tempranamente
Los gráficos de AquaBounty muestran que su salmón necesita poco más de 20 meses para llegar al peso mínimo establecido por la industria, es decir cuatro kilos, comparado con los 28 meses que necesitan variedades criadas comúnmente.
Indicó que el análisis genético permitiría superar la tasa del doble de velocidad de crecimiento en 20 años sin recurrir a una escisión de genes.
Stotish respaldó sus datos, y dijo que sus pescados también crecerían más rápido en tanques comerciales que lo que muestran los gráficos. Denominó lo transgénico como "una forma extraordinariamente poderosa de modificar un organismo".
"Puedes hacer en una generación lo que de otro modo podría tomar 10 ó 100 generaciones en lograr. Pronto tendremos 9.000 millones de personas en la tierra para alimentar, de modo que deben considerarse todas las tecnologías disponibles", dijo el director Stotish. - (Editado en español por Marion Giraldo)
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