EL GENOMA DEL NEANDERTAL

ANTONIO ROSAS PROFESOR DE INVESTIGACIÓN DEL CSIC - LNE.ES- El proyecto llamado «Genoma Neandertal», en el que los científicos de El Sidrón (Asturias) participamos de forma activa, acaba de hacer pública la consecución de los primeros resultados sólidos. El poder disponer de un primer borrador del genoma de una especie humana extinguida -los Neandertales- representa, sin duda, uno de esos avances de la ciencia más propios de lo que imaginamos como futuro que del presente real. Y sin embargo es un hecho.

¿Cómo podemos entender el alcance de este proyecto y sobre todo la participación de los científicos de El Sidrón en el mismo? Muchos son los aspectos que podríamos comentar, y sin duda se comentarán en los artículos difundidos por los medios. Pero, desde esta pequeña parcela me gustaría en esta ocasión enmarcar este proyecto en un contexto amplio de la investigación científica.

Convergen en las investigaciones de El Sidrón dos tradiciones científicas, cuya máxima expresión se alcanza en el protocolo de «excavación limpia» de fósiles neandertales, destinado al aislamiento de moléculas de ADN. Por una parte, la tradición de las ciencias prehistóricas y paleontológicas que desde la Enciclopedia han ido dando concepto y método al registro arqueo-paleontológico y su interpretación en el marco de las ciencias positivas. Y, por otra parte, se incorporan de la mano del ADN fósil los métodos de la biología molecular, la tradición científica experimental sin duda más reciente y de un impresionante poder explicativo.

Los científicos de El Sidrón: arqueólogos, paleoantropólogos, genetistas, geólogos, sumamos intereses y preguntas, llegando a día de hoy -en su sentido más estricto- a sintetizar el ambiente aséptico y futurista de los laboratorios de genética en el fondo remoto de una cueva con el barro y las gravas que contienen los huesos y herramientas de al menos nueve individuos neandertales.

Excavar con método este yacimiento, con la imaginación volcada en unos resultados científicos más propios del futuro que de nuestro presente, hacen que ambas tradiciones científicas se enriquezcan mutuamente, abriéndose paso hacia nuevos paradigmas en el estudio de la evolución humana. Gracias a los fascinantes avances técnicos y a la aportación metodológica de las disciplinas más clásicas de la arqueología y la paleontología, proyectos increíbles con el del Genoma Neandertal son hoy una realidad.