Blogia
CENTRO DE INVESTIGACIÓN DE LOS ANDES

HISTORIA DE UNA COCINERA EN EL CINE

'Drei sterne'.- Producción: Alemania, Austria, Italia y Suiza, 2002.- Duración: 105 minutos.- Dirección y guión: Sandra Nettelbeck.- Fotografía: Michael Bertl.- Música: David Darling.- Montaje: Mona Braüer.- Intérpretes.- Martina Gedeck, Sergio Castellito, Maxime Foerste, August Zirner, Ulrich Thomsen, Sibylle Canonica, Katja Studt, Idil Üner, Oliver Broumis, Antonio Wannek, Diego Ribon

Esta es la segunda película del ciclo de Cine Contemporáneo que proyecta durante estos días Latitudes 2012. Conoció una segunda versión en 2007, titulada Sin reservas, protagonizada por Catherine Zeta Jones. La primera versión que hoy nos ocupa a medida que avanza su desarrollo narrativo va produciendo en el espectador una sensación de grata sorpresa en sus diversos aspectos, tanto argumentales como sensitivos. Esas sensaciones van ganando sitio en la sensibilidad del público tanto por el encanto de la protagonista como por las circunstancias de sus distintas vivencias personales.

Su directora, Sandra Nettelbeck, procedente de la televisión, donde logró éxitos notables, ha puesto, tanto en la creación del personaje protagonista como en el avance de la historia, la suficiente delicadeza y capacidad de acercamiento a los espectadores que logra establecer con estos una auténtica identificación.

Martha es una cocinera que vive para su profesión en una dedicación absoluta y delicada que cultiva en sus habituales preparaciones culinarias lo que hace las delicias de sus clientes del pequeño restaurante en Hamburgo cuya cocina dirige. Vive para su trabajo y se entrega intensamente a él, de manera que prácticamente no tiene vida social. Una trágica noticia cambia su vida cuando su hermana soltera, que vivía sola con su hija de ocho años, fallece en un accidente. Su sobrina, Lina, desolada por la muerte de su madre, es acogida en su casa por Martha. Un día el padre de Lina, a quien Martha había tratado de localizar, aparece y quiere llevarse a su hija a Italia. Martha ha de tomar una decisión y plantearse nuevos derroteros en su vida.

Sentimientos y gastronomía se unen en este relato desarrollado con evidente delicadeza que conjuga los tonos de comedia con esa sensibilidad femenina que emana del personaje protagonista, propia por otra parte del ánimo de la directora, Sandra Nettelbeck, que ha hecho un retrato bastante convincente a pesar de la peculiaridad de su personalidad. A ello contribuye decididamente el acierto de la actriz que la encarna, Martina Gedeck, con una magnífica actuación. Volveríamos así al encanto de Comer, beber, amar (1994), inolvidable película de Ang Lee, de manera que tal como se nos desgrana la narración logra cautivar al público con el donaire de una comedia romántica.

Salvo la excesiva e inoportuna caricaturización del psiquiatra y algunos lugares comunes, pero con otros elementos un tanto transgresores de cierto encanto, Deliciosa Marta, sigue las perspectivas de un cine europeo que en los últimos años ha registrado una evolución muy positiva. Aquí incluso las ilustraciones musicales forman parte de los considerables atractivos de la película.

0 comentarios