Vitaminas, proteinas y minerales, concentrados en este fruto
Nada más rico que unos nachos con guacamole, una buena ensalada con cubitos de aguacate o un “California roll” con trozos de esta fruta. ¿Alguna vez te preguntaste si tales delicias hechas con este fruto, que encontramos de manera cruda en cientos de preparaciones culinarias, te traía algún beneficio para tu piel? La respuesta es ¡por su puesto!
Conocido también como avocado, palta o palpa, es un fruto originaria de Centroamérica y de gran valor para la cultura azteca y maya, habitante de esa zona. El aguacate, que cuenta con una serie de nutrientes y vitaminas, se caracteriza por su pulpa amarilla, como una manteca cremosa, su cáscara verde y rugosa, la encontramos en distintos tamaños y en sus más de 400 variedades.
Cultivado en clima cálido, el aguacate es rico en vitaminas E, A, B1, B2, B3, ácidos grasos, proteínas, minerales como el hierro, fósforo, magnesio y acido fólico. Si bien cuenta con un considerable valor graso y calórico –no recomendable para personas con sobrepeso o que llevan dietas hipocalóricas-, en proporciones moderadas, es altamente nutritivo; si es ideal para quienes practican deporte y los para adolescentes en plena etapa de desarrollo.
Sus beneficios
Por sus propiedades, este fruto ingerido y aplicado sobre la piel trae una serie de saludables beneficios.
- Es preciado para la elaboración de cremas nutritivas para la piel, por su capacidad de penetración y mantenimiento.
- Es ideal para mejorar las pieles secas.
- Para pieles con eczema, dermatitis y granos, ayuda a tratar a estos problemas.
- Su semilla se la usa como aceite corporal para masajes y relax muscular, por su suavidad y absorción rápida en todo tipo de pieles.
- Debido a su contenido de vitamina E que estimula el colágeno, su ingesta ayuda al cuidado de la piel y a retrasar el proceso de envejecimiento.
0 comentarios